En una habitación con poca luz, Judy Hopps y Nick Wilde se entregan a una exhibición de pasión primitiva. El pene venoso de Nick palpita de deseo mientras afirma su dominio sobre la musculosa Judy.
Con los ojos entrecerrados y temblando de anticipación, Judy se somete por completo, y sus medias se suman a la intensidad del momento. Llenas de lujuria, abrazan sus instintos animales en un encuentro crudo y poderoso.